domingo, 4 de marzo de 2012

¿En dónde está mi final feliz?


¿En dónde está mi final feliz?


Situación:

Día domingo (de hace una semana), nada que hacer ni con quien salir. Estoy yo en mi cama mientras Freddie Mercury me dice al oído que nació para amarme con cada latido de su corazón
, y yo, ociosa como siempre, pienso: "Sí, Freddie, yo también nací para amarte, solo que tú eras gay y te moriste cuando yo tenía como 2 años. A pesar de eso, no creo que nuestro amor sea imposible, sino que, más bien, está desfasado en el tiempo" (hay muchas formas de amar ¿saben?). Me río sola, no sólo por las inutilidades que cruzan mi cabeza, sino porque mi patetismo aumenta ¡Tengo que encontrar algo que hacer!

Enciendo el televisor y en Televen está comenzando una película llamada "Un amor para recordar" (A walk to remember) "¡NOOOOOOOOOOOO! Por favor, no veas estupideces, mejor duérmete" dice mi cerebro. A pesar de eso lo ignoré y el aburrimiento me dejó viendo la película.

La típica peli predecible de cabo a rabo (o eso pensaba yo) sobre adolescentes, el chico popular que se enamora de la nerd y bla, bla, bla, bla...y allí estaba yo, soportando lo mismo de siempre, cuando Jamie, la protagonista (sí, voy a contar "lo más importante" pues no creo que se sientan afectados si les revelo el "alucinante" final) le dice al prota que se va a morir porque tiene leucemia. Y yo digo: "Sí, claro. Vamos a ver qué tan rápido se cura la niña de algo incurable. Al fin y al cabo es una película idiota y van a vivir felices para siempre"

¿Qué pasó? Pues que la Jamie se murió. Soporté tooooooooda la película predecible y la protagonista se murió, muerta, muerta ¡MUERTA! Después de que ya mi cerebro se había freído en la estupidez del "amor" de esta gafa y del otro gafo. Y al final, él se queda pensando en que Jamie lo salvó y dice algo que ella le enseñó "El amor es como el viento, no puedo verlo pero puedo sentirlo". Se acaba la película al ritmo de mis carcajadas.
Es decir, después de haber soportado 101 minutos melosos y fastidiosos no hubo un final feliz.

 
¿Y para qué quería yo un final feliz? Para nada. Eso me hizo pensar en que uno siempre quiere que todo salga bien y feliz, pero en este caso yo quería mi puto final feliz ¿Por qué? porque me acostumbraron a la típica formula: tipo conoce a tipa, tipo se enamora de tipa, tipa se enamora de tipo, algo ocurre que hace que el amor de tipo y tipa se ponga "a prueba", tipo y tipa viven felices hasta que terminan los créditos.

Pero después me dije "Pero si yo amo los finales tristes, irónicos y crueles ¿qué me pasa?" ahí fue que me di cuenta que el final tampoco había sido triste porque Landon, el protagonista, no quedó en depresión continua, ni tampoco intentó suicidarse, ni se echó a morir; el logró sus metas y en cierta forma fue feliz ¡Qué lindo! ¿LINDO? ¿LINDO? En esas películas ponen como si la vida es muuuuuy fácil, algo así como que si fuera un manual de instrucciones para preparar sopa instantánea (que hasta yo, que NO cocino, que no cocinaré jamás, puedo hacer).


Volviendo al hecho de que uno siempre quiere que todo salga bien y luego viene la Ley de Murphy y te jode. Justo eso le pasó a Jamie y Landon, y justo eso nos pasa a todos en diferentes casos. Pero ¿no será la búsqueda de ese "final feliz" lo que arruina todo?


Vamos a verlo así, pero primero ¿Quién no ha visto La Bella y la Bestia de Disney? (¿cómo coño se llaman los príncipes en todos esos cuentos, pues me niego a creer que se llamen "Azul" y "Bestia"?). Bella estaba aburrida y quería buscar algo que hiciera su vida interesante y en esa búsqueda no se dio cuenta de que ahí estaba Gastón. Claro, ella no lo quería en lo absoluto, pero ¿qué tal si se hubiera "divertido" un poco con él? ¿no se hubiera vuelto más interesante su existencia? Eso no cambia el hecho de que después se encontraría con Bestia y vivirían felices por siempre (Yeah, right!).

Otro caso, Ariel de La sirenita, la sola idea de ser humana y de revolcarse con Eric la traía absolutamente loca, lo cual le impidió disfrutar de su vida en el mar, le impidió ver que allí, tal vez, había algo bueno y "feliz" para ella.

No quiero decir que uno debe conformarse con lo que sea, sino que hay que evitar complicarse la existencia, porque el "final feliz" no existe. ¿Qué creen que pasó con Ariel después de que se casó con Eric? (obviemos el hecho de que existe una segunda y tercera parte), ¿Qué pasaría con Cenicienta y Príncipe (¿Cómo rayos se llama?)? (obviemos el hecho de que de esta también hay una segunda y tercera parte) ¿Qué tal le fue a Aurora y a Felipe?


Es que el apresuramiento y la búsqueda de "lo mejor" es lo que evita que se vea lo bueno que hay en algún momento de nuestras existencias. Porque la felicidad no se limita a un momento, por eso es que un solo segundo de alegría no nos va a proporcionar felicidad para toda la vida, porque no es fácil. Por eso me niego a creer que Ariel y Eric, y todos los demás, "vivieron felices por siempre".


Y a la vez existen muchos tipos de finales: final del día, final de la vida, final de temporada, final de año, final de mes, etc. La idea es lograr que sean lo mejor posible sin caer en conformismos e ideales imbéciles. Hay que abrir los ojos para ver si realmente hay algo bueno en lo que perseguimos, si vale la pena. Pero, al fin y al cabo, cada quién hace lo que le da la gana y si alguien desea complicarse la vida por gusto, pues adelante. Buscar el drama es aburrido.
Por cierto, cuando algo llega a su final es porque se acabó, como este post.

                                                           concejo del dia :

 

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